Un time-lapse es una especie de fotografía secuencial. O sea, una secuencia de fotografías o fotogramas en un intervalo de tiempo que pueden ser horas o incluso días, pero que se reproduce en cuestión de segundos o minutos en una toma de vídeo.
Es posible que te preguntes si un time lapse sirve para algo. La verdad es que sí, por eso nos hemos especializado en este tipo de realización en Kreativa.
¿Por qué hacer un time lapse?
El time lapse permite observar hechos que suceden a muy lenta velocidad en un breve lapso de tiempo. De esta forma, cosas tan sencillas como el movimiento de las nubes las podemos disfrutar en cuestión de segundos en un time lapse.
Para hacer este tipo de contenido, tan solo se debe grabar desde una secuencia de vídeo que luego es acelerada por software de edición a una velocidad seleccionada.
¿Cómo se logra este efecto? Es importante contar con un buen equipo de cámara. El trípode es primordial para que el plano sea fijo, pues no se moverá durante horas. Además, hay que cuidar al detalle el encuadre, es decir, el plano por el que optamos. Y, por supuesto, no puede fallar el enfoque, siempre ajustado y bien revisado.
Y todo este trabajo, ¿para qué? Tal vez te lo preguntes. Por lo general, sirve para mostrar procesos naturales, pero también para observar la evolución de una gran construcción, por ejemplo.
Es decir, que un time lapse puede ser una herramienta de marketing extraordinaria para crear vídeos creativos, atractivos, que lleguen a tocar las emociones de los usuarios, de forma que el mensaje que se quiere transmitir sea más humano, cercano, eficiente y eficaz.
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